viernes, 5 de diciembre de 2014

Tú puedes ser un Sembrador de Estrellas

Infancia Misionera


¿No has salido a repartir estrellas por las calles? ¿No has salido con los famosos SEMBRADORES DE ESTRELLAS por las calles, las casas, las tiendas de tu pueblo, o de la ciudad en la que vives?

Pues lo hacen en España cerca de 100.000 niños. Únete; son chavales estupendos. Los conocemos bien. No estamos hablando de eso de salir a de pedir el aguinaldo; no. Estamos hablando de salir a regalar estrellas a las personas que pasean en vísperas de Navidad sin pedir a cambio nada. Es formidable. Los que pasan por la calle no se lo creen, pero son gratis.

Jesús está deseando llenar de alegría este mundo triste. ¿De quién se puede valer para alegrar a las personas que lo habitan? Pues de los niños y niñas majos de esta tierra, o sea, de ti y de los que son como tú.

Y se le ha ocurrido este invento de que salgáis cantando por las calles, felicitando a los que pasan con la cara larga, o con la cara corta, y que les regaléis, de su parte, una estrella adhesiva que sea como una sonrisa en la solapa o en el abrigo de todos.

Decidme si no es esto muy parecido a convertiros en ángeles que anuncian con cantos y estrellas que Jesús vive entre nosotros, como lo hicieron aquellos de Belén. Y decidme si no es estupendo que la gente escuche este mensaje a través de los nuevos mensajeros de la Navidad, o sea, vosotros.

Ser "Sembradores" es una gran responsabilidad: no podemos salir a "sembrar" sin más. Por eso os proponemos que en el cole, en la parroquia, con vuestro profe, monitor o catequista os preparéis, durante todo el Adviento, para recibir a Jesús y anunciar esta alegría a los demás.

Y ¿sabéis una cosa? Nos hemos dado cuenta de que los "Sembradores" tenéis un corazón generoso, así que os invitamos a que, tras sembrar vuestras estrellas, os llevéis a casa la "hucha del compartir" y os comprometáis como buenos misioneros a vivir una Navidad solidaria, llenando vuestras huchas para entregarlas en la Jornada de Infancia Misionera 2015.

Ponte de acuerdo con tus amigos y sal a cambiar las caras tristes en caras alegres; sal a repartir estrellas. Tú también te sentirás como nuevo, como mensajero de una noticia importante; «Jesús ha nacido». Y es que tú y yo lo sabemos, pero a otros muchos hay que recordárselo.

Xavier Illundian