lunes, 15 de febrero de 2016

Rumbo a la misión en Perú

Obras Misionales Pontificias España


Manuel Cuervo y Cecilia Rey son un matrimonio, de la Delegación de Misiones de Madrid que mañana parten como laicos misioneros al Vicariato Apostólico de San Román en Perú
El matrimonio Manuel y Cecilia vivirán dos años como laicos misioneros junto a dos misioneros españoles, Alfonso Tapias y Francisco Andrés allí colaborarán en la pastoral diocesana colaborando con Cáritas diocesana y darán asistencia a varios poblados indígenas.
Manuel y Cecilia forman parte del grupo “Jóvenes para la Misión” y han participado en diversas experiencias misioneras de verano misión en Etiopía, Marruecos, Sierra Leona, Cuba, allí explican ellos fueron sintiendo la llamada a un "compromiso más duradero". Hoy explican esta vocación misionera y este paso que van a dar como "Una alegría, un don de Dios, un gran regalo que el Señor nos ha hecho" dice Manuel sobre su marcha a la misión en Perú.
Ayer se celebró la ceremonia de envío en su parroquia del Sagrado Corazón de Madrid, en ella Manuel leyó en nombre de los dos estas palabras de agradecimiento:  
"“… y al instante dejando las redes le siguieron”
Este versículo del evangelio ha marcando nuestra vida desde que este verano  al regresar de Cuba tuvimos claro que el Señor nos llamaba a la misión.
“… y al instante …”
Nuestro instante quizá sea un poco largo desde que en el 2009 tuvimos nuestra primera experiencia en Etiopía, el Señor ha ido preparando el corazón, nos ha ido formando y enriqueciendo en todas las experiencias de verano que desde entonces hemos vivido. Hay que decir que mi instante ha sido un poco más largo que el de Cecilia, ya hace tiempo que me viene diciendo que teníamos que partir.
“… dejando las redes …”
Está llamada que Dios nos ha hecho a través de su Iglesia, implica dejar las redes, contemplando el evangelio vemos que los apóstoles también tenían sus redes, su vida, su familia, su trabajo, su barca, sus redes.
Podemos pensar que la llamada de Dios es a dejar cosas que nos entorpecen para estar cerca de Él, de este tipo de cosas también las hay, pero hemos podido experimentar que nuestras redes son aquellas que nos han acercado a Dios y que además son las que Dios nos ha ido dando hasta hoy, nuestro trabajo del que los dos nos sentimos orgullosos, Manos Unidas y MediaNet SW, el grupo de matrimonios, el de evangelizadores… en definitiva la parroquia, la familia, nuestros padres, hermanos y nuestras 9 sobrinas y 2 sobrinos, y lo que más nos ha acercado a la misión y nos ha enseñado a amar la gran misión de la Iglesia, Jóvenes para la misión.
“… le siguieron”
Seguir a Jesús, seguir no es solo ir detrás de alguien, es ir en compañía, ir junto a alguien. Jesús ha salido a nuestro encuentro y nos ha invitado a seguirle de otro modo.

Por último queremos darte gracias a Señor, por la Acción Católica que nos llevó a ti y nos hizo madurar en la fe, gracias por las Parroquia de la Concepción  y la Parroquia de los Dolores. Gracias por tantos sacerdotes buenos que has en nuestro camino. Gracias por nuestros padres, hermanos, sobrinas y sobrinos en gran parte somos lo que somos por lo recibido de ellos.
Gracias por esta parroquia que nos acogió con los brazos abiertos, gracias por los matrimonios con los que hemos compartido esta apasionante vocación, por los coros de misa de 12 y de 13, y por todos y cada uno de los fieles con los que hemos vivido nuestra fe.
Gracias por Jóvenes para la Misión, por cada uno de nuestros queridos amigos son muchas las reuniones, las actividades… en definitiva compartimos el amor a la misión y a los misioneros.
Y gracias Señor por José María que nos acompaña en nuestro camino y ha confiado en nosotros para esta misión." Manuel y Cecilia

Manuel y Cecilia han sido colaboradores en el programa de Radio María “Iglesia en Misión” y es allí donde hicieron pública esta grata noticia misionera en una entrevista: 

También fueron entrevistados en 13TV:

#OremosxMisioneros hoy especialmente por Manuel y Cecilia que con su vocación misionera han dado el paso para salir al encuentro de los más necesitados para anunciar el Evangelio y mostrar el rostro misericordioso de Dios.