OMPRESS-NEPAL (13-05-15) Este martes, un nuevo terremoto de magnitud 7,3 golpeaba de nuevo Nepal matando a 36 personas e hiriendo a más de mil, provocando deslizamientos de tierra y derribando edificios. Todo esto tres semanas después de que el país sufriera uno de los peores terremotos de su historia, con una magnitud de 7,8 grados.
Este terremoto tenía lugar mientras el país, todavía de luto por sus muertos, apenas empezaba a recuperarse de la tragedia que ha acabado con la vida de más de 8.000 personas. El padre Pius Perumana, director de Caritas Nepal reconocía: “No sabemos la situación real en muchas zonas debido al colapso de grandes edificios”.
Los 68 jesuitas presentes en Nepal están a salvo, según informan desde la Compañía. Los jesuitas atienden en el país cinco colegios, una universidad y diversas obras de apoyo a jóvenes desfavorecidos, tanto en la capital, Katmandú, como en Pokhara, Deonia y Maheshpur. Muchos de los jesuitas de Nepal estaban en la remota aldea de Okhaldhunga para celebrar una ordenación cuando ocurrió el terremoto. Ahora tratan de volver a Katmandú a través de los caminos bloqueados y afectados por los derrumbamientos.