miércoles, 25 de mayo de 2016

REUNIÓN DE MISIONEROS DE LA DIÓCESIS DE SIGÜENZA-GUADALAJARA.

El 16 de Mayo, lunes, fue un día de gran alegría en nuestra Delegación de misiones de Sigüenza-Guadalajara, pues nos reunimos un gran número de misioneros.
 Unos aún en el tajo, como es el caso de Mariano, Faustino, Elías y otros ya vueltos (Leandro, Ricardo, Lucas, Miguel Ángel y David).
 A la reunión asistieron otros dos  sacerdotes. Uno que ha tenido un contacto directo con la misión de forma temporal, Luis. Otro que espera la luz verde de nuestro señor Obispo para partir, Ángel.

El inicio  de nuestra reunión la tuvimos en la Delegación de Misiones, donde, en primer lugar, hubo un recuerdo y felicitación especial a Mariano Martínez por la Celebración de sus bodas de oro sacerdotales. Le hicimos entrega de un pequeño recuerdo.
En el transcurso de la reunión se proyectaron una, diapositivas. La primera tanda tenía como tema la reciente celebración de la fiesta de S. Juan de Ávila, que tuvo lugar en Sigüenza el 12 de Mayo.  La segunda tanda de diapositivas hacían alusión al trabajo que realizan los misioneros: en ellas se veían los grupos de personas con que trabajan, ceremonias litúrgicas, costumbres…Mariano nos fue explicando su contenido. También la situación por la que pasa actualmente la Iglesia y la sociedad de Brasil.
Luego tomó la palabra Faustino Torralbo. Nos informó de su nuevo trabajo pastoral. Ha dejado ya sus parroquias por edad y ejerce su ministerio en la Catedral de Rafaela. Tiene una dedicación muy especial a atender el sacramento de la Misericordia y reconciliación.

La segunda parte de nuestro encuentro fraternal siguió en una comida de fraternidad, que se desarrolló en un ambiente de mucho gozo y comentarios alusivos a recuerdos misioneros que habían vivido los presentes.

Ni que decir tiene que también se abordó el momento presente respecto a la actividad misionera en nuestra diócesis y todos convinimos en que hay que seguir potenciando el espíritu misionero para que surjan nuevas vocaciones, que recojan el testigo de los misioneros diocesanos, que aún permanecen en tierras de misión, sobre todo en América.