Desde el Dicasterio para la Evangelización y las Obras Misionales Pontificias de Roma, han hecho llegar su agradecimiento por la generosidad que los católicos españoles tienen con las vocaciones en los países de misión y la campaña de Vocaciones Nativas.
El padre Guy Bognon es el Secretario General de San Pedro Apóstol, la Obra Pontificia que tiene como finalidad el apoyo espiritual y material a las vocaciones en los países de misión. En su comunicado de agradecimiento, dirigido al padre José María Calderón, director nacional de las Obras Misionales Pontificias en España, manifestaba: “Hemos recibido su comunicación sobre las ofrendas recogidas y disponibles para la Obra de San Pedro Apóstol (2.041.561,85 de euros). ¡Vuestra Dirección Nacional es la única que pone a disposición una cantidad tan enorme para la formación de los futuros sacerdotes nativos! En nombre de todos los seminarios y casas de formación religiosas en las Iglesias Jóvenes del mundo, de todo corazón, le damos las gracias a usted y a todo el Pueblo de Dios en España por su fe y su compromiso generoso al servicio de quienes están llamados a la vida consagrada. Roguemos al Señor, que es el Dueño de la mies, para que les muestre su inmensa bondad cubriéndoles de gracias y bendiciones en abundancia”.
Los más de dos millones de euros puestos a disposición de la Obra de San Pedro Apóstol corresponden a lo recaudado durante el año 2023. A finales de este mismo mes de mayo, sumado a lo recaudado en todo el mundo, se presentará su destino –seminarios y casas de formación de los territorios de misión– en la Asamblea de las Obras Misionales Pontificias que tendrá lugar en Roma. A partir de ese momento comenzarán a llegar a todas las direcciones nacionales del mundo las órdenes de envío de todo este Fondo de Solidaridad con las vocaciones, de manera que a finales del verano hayan llegado a sus destinatarios, jóvenes que han respondido a su vocación sacerdotal o religiosa en las Iglesias jóvenes.
El agradecimiento del padre Bognon tiene, si cabe, más relevancia puesto que él mismo, nacido en Benín, ha sido una de las vocaciones ayudadas en su momento por la Obra Pontificia de San Pedro Apóstol y la campaña de Vocaciones Nativas. Se formó en los seminarios benineses de Saint Paul de Djimè, Notre-Dame de Fátima de Parakou y en de St. Gall de Ouidah. Una vez sacerdote, también fue formador en este último seminario, el de St. Gall, y, finalmente, rector del seminario de Saint Paul, antes de incorporarse a las oficinas internacionales de las Obras Misionales Pontificias y al Dicasterio para la Evangelización en Roma.
